"El tema de la literatura siempre ha sido
el hombre en el mundo"
Jean-Paul Sartre
Antes de emprender concretamente el viaje por la literatura española, antes de ahondar(nos) en obras, autores, ideas y debates vehiculados por de las letras en lengua castellana, se me hace necesario concentrar la atención en unas problemáticas fundamentales en los estudios literarios. Éstas son relativas a la naturaleza de los textos, a la forma de concebirlos en la historia de los hombres y de las culturas, y a la(s) interpretación(es) de sus mensajes. Intentaré pues resumir, aunque esquemáticamente, la última clase introductoria a la literatura en el 4D. La llamaría “Literatura.0”.
Retrato de la poetisa Safo, Pompeya |
La palabra texto nos remite enseguida a su raiz latina, y al ancestral gesto humano de entrelazar, cruzar y crear: “textus”, participio del verbo “texere”, osea tejer, trenzar, urdir un conjunto coherente de relaciones entre partes. Cada texto pues, al igual que cada acto de tejer, es cultural e histórico, osea se realiza en un preciso momento, en determinadas circunstancias, en un lugar geográfico dado, y tiene una autoría, sea colectiva o individual. Pre-texto, texto y con-texto. Pensándolo así, también el texto literario aparece como producto – atención, no he dicho “reflejo”- de una época y de un autor, quien es él mismo un hijo de su tiempo, integrante de cierta sociedad y portador de experiencias, valores e ideas particulares. Además, por ser un acto creativo, cada obra literaria de todo tiempo y toda cultura posee una intencionalidad comunicativa, una dimensión ilocutiva y perlocutiva, es decir que se realiza para transmitir un mensaje para cierto público de receptores, y para suscitar una reacci ón en dicho público. Lo dicho es válido desde la más trascendental de las obras de arte creada por el hombre hasta el m ás trivial y aparentemente insignificante de los actos de comunicación.
De la Odisea a los Simpsons, de las Catilinarias a los graffitis de nuestras ciudades modernas.
Ahora bien, para abordar en nuestro caso provechosa y críticamente el estudio de una serie escogida de obras y autores de la literatura española, es necesario entonces considerar los textos siempre en su con-texto, osea enmarcándolos en su época para poder entender en profundidad su significado, su mensaje, su intencionalidad, en fin su misma razón de ser. Por eso en nuestra última clase de “Literatura.0” les ven ía proponiendo un acercamiento metodológico al estudio y la interpretación de las obras literarias que contempla tres niveles – o planos- de análisis.
Los dos primeros, siendo el nuestro un curso de historia de la literatura, contextualizan el texto y ubican “cartesianamente” en su época y en su sociedad el autor, proporcionando así el punto de vista de éste sobre la realidad que vive y en que obra. El tercero corresponde al análisis de la obra en sí misma, de sus propiedades y carácterísticas, sus personajes, su trama, su composición, su estructura, su mensaje y su público receptor del mensaje.
- NIVEL POLITICO: ¿en
qué contexto político obra el autor?
- NIVEL SOCIAL: ¿desde
qué clase social/sector/gremio el autor escribe la obra?
- NIVEL INDIVIDUAL: ¿Qué
mundo/realidad específica presenta la obra? ¿quiénes son sus
personajes, su trama, técnicas y procedimientos narrativos?
¿Qué visión del mundo conlleva, y cuál es su intencionalidad
artística? ¿A quién se dirige, y cuál es su mensaje?
¿Cuál es la relación entre su ESTÉTICA y su ÉTICA?
En otras palabras, tal como sugiere la hermenéutica, que es la la “ciencia de la interpretación”, para entender plenamente un texto, para permitirle que viva, osea que nos hable, y que nosotros comprendamos su mensaje y su valor -si es que lo tiene- es necesario emprender un viaje circular a la bùsqueda del sentido que vaya DEL MUNDO AL TEXTO, Y DEL TEXTO AL MUNDO.
Hagámos pues nuestra la idea del maestro György Lukàcs (1885/1971), filósofo y teórico de la literatura, quien nos
sacude del academicismo estéril de los estudios literarios: “la
literatura, enmarcada correctamente en sus condicionamientos
históricos, es conocimiento, mas conocimiento no por el valor
que puede tener en sí mismo, sino porque de él se deriva algo
básico: la acción del hombre en su tiempo”. Viéndolo así, la literatura adquiere
nuevos y positivos valores: la literatura como crítica y comentario
de la vida humana, literatura como conciencia, la literatura como
parte integrante del proceso histórico-dialéctico del desarrollo de
la humanidad. La literatura, en fin, entendida justamente, es un
fenómeno social y socialmente mediado, es la percepción de la
realidad a través de la imaginación creadora.
"...interpretar es la verdad..." ,
Cultura Profética, "Inspiración", en vivo en Medellìn, 2005
Cultura Profética, "Inspiración", en vivo en Medellìn, 2005
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